Nuestra/o niña/o interior tiene que volver a confiar en nosotros/as.
La hemos dejado sola/o demasiado tiempo y cómo mínimo estará recelosa/o y desconfíada/o con nosotras/os.
Tenemos que ganarnos su confianza,
Para ello, el reto de la casilla 3 es programar tu móvil, cada hora con una alarma y cada vez que suene tu alarma vas a ir en busca de un espejo, vas a mirarte a los ojos, vas a conectar a través del espejo con esa niña/o que eras, vas a recordar cómo te llamaban de pequeña/o y así, mirándote a los ojos, respirando profundo, vas a decir su nombre y vas a decir:
[Su nombre] ¡Te amo! Te amo profundamente y quiero volver a recuperarte, quiero volver a vivir contigo, escuchándote.
Porque has comprendido que tu felicidad depende del bienestar de tu niña/o.
No pongas excusas, programa tu móvil cada hora y cada vez que vibre o suene ve al espejo y haz el ejercicio.
Si en alguna ocasión del día no tienes cerca un espejo bastará con cerrar los ojos, respirar profundo y hacer el ejercicio mentalmente.
Te espero en la próxima casilla. Deja constacia de tu trabajo con esta casilla para seguir avanzando.